Momentos preocupantes vivió el grupo de búsqueda activa comunitaria de la Secretaría de Salud, cuando se disponían a realizar sus funciones en el marco de la detección e identificación de personas con sintomatología acorde para coronavirus.
Los profesionales fueron increpados, atacados con piedras y objetos contundentes por un grupo de personas fármaco-dependientes, cuando se les hizo recomendaciones de prevención del COVID-19.
“Los hechos acontecieron en la avenida sexta entre calles 6 y 7 del centro de Cúcuta. En horas de la mañana, cuando una doctora, una jefe de enfermería y tres auxiliares empezaron a brindar recomendaciones sobre el uso del tapabocas y la importancia del distanciamiento social, fueron atacadas por estas personas. En medio de la situación, tuvieron que intervenir trabajadores de Veolia para defender a las funcionarias”, aseguró Ricardo Vanegas, enfermero profesional de la Secretaría de Salud.
Afortunadamente las funcionarias salieron ilesas. Sin embargo, los profesionales dieron aviso a la coordinación del COVID-19 del ente municipal, siendo necesario el acompañamiento de la fuerza pública para continuar con la labor que venían desarrollando.
“Llegó la policía al lugar, arrestando a dos de los agresores quienes fueron llevados al Comando de Atención Inmediata del Palacio Nacional, para su respectivo trámite”, aseveró Ricardo.
Por otra parte, la doctora Mary Peñaranda, quien fue testigo de los hechos, aseguró que todo fue muy rápido y confuso, pero que condiciona gravemente la función de los profesionales de la salud.
“Todo ocurrió muy rápido. Hubo quienes aseguraron que los agresores intentaron hurtar a los funcionarios de Veolia, pero lo importante a destacar es que hoy mi equipo tuvo miedo; no solo nos arriesgamos a diario a contraer la enfermedad, ahora también tenemos que estar alerta de quienes nos atacan en la calle por realizar nuestra labor”, puntualizó la profesional.
En ese contexto, el llamado que realizan los profesionales de la salud es a tomar conciencia sobre sus acciones, que no tienen otro propósito más allá de apostarle a la educación como herramienta de transformación social, en momentos donde la pandemia aún está latente en el municipio.