Con el objetivo de incrementar la producción cárnica y láctea del sector ganadero en los corregimientos de San Faustino y Guaramito, el Alcalde Jairo Yáñez conoció de primera mano los avances que se tienen en el proyecto de mejoramiento genético del sector bovino en la finca ‘La Anita’.
“Tuve la fortuna de ser hijo de campesinos, por eso quiero dejar un mensaje claro. Es necesario fundamentar nuestra estrategia Campo-Ciudad a partir de la capacitación, el emprendimiento y el valor agregado, crear un banco genético, con inseminación y trasplante de embriones para todo el sector agropecuario pensado en los pequeños campesinos, es la apuesta más importante con visión de futuro, además de un mensaje claro del apoyo que debemos dar como administración a nuestros campesinos” explicó el alcalde de Cúcuta. “Acompañar nuestra zona rural será la mejor experiencia para neutralizar el efecto de los grupos ilegales, la violencia en el campo tiene un asentamiento fundamental, el abandono. Nuestra Alcaldía seguirá trabajando por el campo” puntualizó.
Este proyecto inicia por la preocupación del alcalde Jairo Yáñez de colocar sobre la mesa, alternativas sostenibles de mejoramiento de ingresos para los pequeños productores de la zona rural, acción a partir de la cual se propone mejorar genéticamente la producción de carne y leche en San Faustino (uno de los corregimientos con mayor tradición ganadera)
Por esto, la administración municipal avanza en las siguientes etapas:
- Fase I – Creación y formalización de la Asociación de Ganaderos de San Faustino y Guaramito (ASOGASAFA) integrada por 20 familias campesinas, lo cual ya es un hecho.
“Es la primera vez que se hace esto en el municipio de Cúcuta, brindar todo el apoyo y acompañamiento para la consolidación de una Asociación, pero además la entrega de implementos e insumos para mejorar la productividad de nuestro ganado, estoy muy feliz de ser beneficiario de este programa de la Alcaldía de Cúcuta y muy agradecido con la visita del señor alcalde” indicó José Luis Morales, ganadero de la finca ‘La Anita’.
- Fase II – Capacitación a los productores (para que sean estos mismos quienes implementen mejores prácticas), así como el aporte de un banco de proteínas como suplemento alimentario. Etapa que ya se viene ejecutando.
Este proyecto está además acompañado de una dotación de árboles de matarratón para mejorar el banco de proteína de cada ganadero, abono orgánico, capacitaciones y asistencia técnica para que los productores mejoren constantemente los procesos en sus fincas.
También es importante destacar que en esta fase mejoramos, capacitamos y fortalecemos la asociación para que sea autosuficiente en todas sus acciones y actividades, para que no tenga que depender del técnico o el profesional, sino por el contrario puedan ejecutar acciones de inseminación o de otro tipo, por si solos.
- Fase III – Inseminación artificial, para aumentar el potencial de producción de los bovinos de la zona. Fase en la que nos encontramos actualmente.
EL objetivo del proyecto es que las familias ganaderas de estos corregimientos logren incrementar sus ingresos de manera sostenible logrando mejores producciones de leche o carne. “Por ejemplo: si una vaca diariamente produce en promedio 4 litros de leche, con el mejoramiento de la genética y la implementación de mejores prácticas ganaderas la vaca podrías pasar a producir 7 u 8 litros de leche, esto representa un incremento tangible, real de los ingresos del pequeño ganadero, lo que se termina traduciendo en una mejor calidad de vida, que es al fin y al cabo lo que se busca, mejorar de manera sostenible la vida de las personas” indicó Juan Diego Peña, subsecretario de Desarrollo Social.
Esta etapa contempla la inseminación artificial, proceso que cuenta con todos los protocolos y la utilización de vacunas reproductivas para asegurar parte de este proceso. Hasta la fecha son 75 las vacas que han sido inseminadas con pajillas de toros de razas angus, gyr y simmental.
“Hay un proceso de inseminación donde se han traído razas como angus, simmental, jersey y holstein, pero lo más importante de esta actividad es la capacitación de la que estamos siendo objeto todos los propietarios, quienes ya hemos aprendido a inyectar, inseminar, entre muchas otras cosas” indicó German Blanco Ortega, propietario de la Finca ‘El Diamante’, ubicada en la vereda ‘La China’, en el Corregimiento de San Faustino.
“Si estamos asociados, capacitados y somos conscientes, podemos pensar en créditos asociativos para mejorar iniciativas de este tipo. Indicó Jhon Bonilla, asesor de la secretaría de Desarrollo Social que trabaja de la mano con ASOGASAFA.
Este será el primer piloto para después escalarlo a otros corregimientos (Agua Clara, Ricaurte y Banco de Arena se espera puedan ser los próximos) para que esta buena iniciativa se multiplique.
¡Nuestro compromiso con la zona rural sigue consolidándose!