Con el fin de disminuir el número de personas quemadas con pólvora en la celebración de las fiestas de fin de año, la Alcaldía de Cúcuta, a través de las secretarías de Gestión del Riesgo, Salud y Gobierno, lanza la campaña ‘Cúcuta sin Pólvora’, con la cual busca generar conciencia evitando más situaciones de riesgo de las que ya se viven en el municipio por culpa de la pandemia derivada de la COVID-19.
Según los reportes de la Secretaría de Salud Municipal, durante el 2019 se presentaron 45 personas quemadas; en lo corrido de este año van 22, de las cuales 12 se reportaron en la segunda semana de enero.
Los tipos de artefactos con pólvora que más producen lesiones en el país son, en un 30%, los totes; 11.9% los cohetes, 11.7% los voladores, 4.7% las luces de bengala, 4.6% los volcanes; y el 25% restante, otros elementos que generan grandes lesiones en las personas que no saben utilizarlos.
Las actividades causantes de estas lesiones son, en un 63%, la manipulación; el 22% de las personas que están observando también resultan quemadas; el 10% por otras circunstancias, el 1.3% por almacenamiento, el 2.3% por transporte, el 0.8% por venta y el 0.2% por fabricación.
Por eso, la campaña ‘Cúcuta sin Pólvora’ busca que la ciudadanía sea consciente de los riesgos que se corren al manipular estos artefactos que generan daño tanto en las personas, como el ambiente y los animales.
Según un estudio publicado en la revista científica ‘Environmental Science and Technology’, se demostró hace ya varios años que los compuestos químicos de los fuegos artificiales contaminan el aire, el agua, deterioran la fauna e incluso pueden generar incendios.
Asimismo, se ha corroborado que los gases artificiales liberados durante una explosión de pólvora, como el monóxido de carbono, pueden tardar entre dos y tres días en desaparecer totalmente del aire, y aunque estos efectos son pasajeros, contribuyen con el aumento progresivo de la polución.
Por otra parte, los efectos negativos que produce la pólvora en los animales son, principalmente, por el ruido de las explosiones, pues los animales escuchan mucho más alto estos sonidos que los seres humanos.
“Bajo las directrices del alcalde Jairo Yáñez, realizamos esta campaña en articulación con las secretarías de Salud y Gobierno, que busca concientizar a los cucuteños para que entiendan que diciembre no es sinónimo de pólvora, queremos que la ciudadanía disfrute esta temporada en casa rodeada de su familia y evitando las situaciones de riesgo”, manifestó Huber Plaza Villamizar, secretario de Gestión del Riesgo de Desastres.
En el caso de los perros, dijo el funcionario, presentan un aumento de la frecuencia respiratoria, salivación excesiva, vómito, orina, defecación, algunos tiemblan, corren, ladran e, incluso, pueden presentar reacciones agresivas, anormales en su comportamiento, como destruir objetos cercanos o morder algo o a alguien.
Desde la administración municipal se invita a toda la ciudadanía para que disfrute de manera segura y responsable la época decembrina, que este mes sea sinónimo de amor, tranquilidad y paz, de todos depende pasar una Navidad feliz en casa.