Con una planeación para el 2050, se inició la conversación entre los mandatarios y sus equipos de trabajo. El objetivo de la jornada era intercambiar propuestas sobre las gestiones de proyectos y temas decisivos, como la migración o los índices de seguridad, materias importantes que se deben aplicar efectivamente de manera coordinada.

Una ciudad competitiva, con herramientas de impacto para potenciar el desarrollo de la región, enfocada en las tecnologías, la educación de calidad y una ruta de gestión, fueron los asuntos abordados en el primer encuentro realizado entre la nueva administración de la Alcaldía de Cúcuta y la Gobernación de Norte de Santander.

Para originar una consolidación de oportunidades en el departamento, se deben unir los dos planes estratégicos, “la meta es fundir un proyecto completo, afirmando fuerzas y de esta manera lograr avanzar en estos cuatro años de gestión administrativa”, declaró el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez.

El plan regional de competitividad y otros documentos que están en construcción, van a direccionar la planificación del territorio. Existen varios modelos estudiados que plantean algunas maneras de estructura y contribución con el desarrollo económico, que aumentan a medida de que se logren instrumentar la materia prima y transformarla en producto.

También es fundamental el sondeo de recursos que se van a destinar desde lo público, la vinculación del sector privado desde la inversión y la atracción de nuevos capitales que disponga el Gobierno Nacional mediante la gestión local.

Se realizó un alistamiento de proyectos que no son definitivos, pero que surgen como estrategia principal, como lo son la adecuación de la infraestructura de la Zona Franca y el fortalecimiento de estos espacios que estimulan la promoción del empleo y la productividad. “Hemos definido una comisión técnica de enlace, a través de un documento, un hecho trascendental que pacta la agenda bilateral”, reiteró el gobernador Silvano Serrano. Agregó que tocar temas como la creación de autopistas digitales, o la microzonificación sísmica del territorio en asuntos de expansión, van de la mano de una alfabetización digital, o de la conservación mediante estudios ambientales sobre la calidad del aire y el sonido,  situaciones que se deben enfrentar paralelamente para conducir el cambio.